¿Conoces el TOC de amores o TOC relacional?

La palabra <obsesión> procede del latín obsessionis que significa «asediado o cercado» y la palabra <compulsión> viene del latín compulsio, es decir, efecto de compeler, que sería forzar a una persona a actuar en contra de su voluntad.  En esto se basa el Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC), uno de los cinco trastornos psicológicos más incapacitantes según la Organización Mundial de la Salud (OMS) presentando comorbilidad con otros trastornos. El TOC ya lo hemos visto en otros blogs, pero hoy nos centraremos en uno de los tipos más curiosos: el TOC de amores o TOC relacional.

TOC de amores

Concepto de TOC

Este trastorno se caracteriza por la presencia de obsesiones y compulsiones:

  • Las obsesiones son pensamientos, imágenes o impulsos recurrentes y persistentes, que las personas que las padecen consideran inaceptables, absurdas o sin sentido, y les ocasiona malestar o ansiedad. Las personas afectadas intentan ignorarlas, suprimirlas o neutralizarlas con otros pensamientos o acciones.
  • Las compulsiones son conductas repetitivas (p.ej., lavado de manos, ordenar cosas, etc.) o actos mentales (p.ej., contar o imaginar algo bueno) que tienen la función de reducir la ansiedad o bien prevenir algún hecho temido que haga aparecer la obsesión.

Tipos de TOC según la obsesión

Dentro del trastorno obsesivo compulsivo podemos encontrar varios tipos dependiendo del contenido de las obsesiones y su diferente arsenal de compulsiones. En ese caso, nos encontramos que las obsesiones y compulsiones más frecuentes son:

Ideas de contaminación

Sensación intensa y persistente de estar sucio, infectado o en peligro como resultado del contacto directo o indirecto con personas, lugares u objetos sucios, impuros, infectados o dañinos. Los estímulos que suelen generar estas obsesiones pueden ser hospitales, gérmenes, sangre, urinarios, etc.

Dudas acerca de posibles daños o errores graves

Las obsesiones son en relación a fallos en la seguridad (p.ej., apagar los electrodomésticos, el gas, cerrar las puertas o ventanas), que se asocian con el miedo a incendios, robos o desastres. En estos casos la compulsión suele ser de comprobación (examinar puertas, comprobar las llaves, repetir un recorrido con el coche, etc.).

Violencia y agresión

La obsesión tiene como contenido la violencia física hacia sí mismo u otros. Estos pensamientos generan mucha ansiedad, sentimiento de culpabilidad, temor a volverse loco, sentir vergüenza, etc. Las conductas compulsivas pueden consistir en repetirse frases acerca de que realmente no es violento.

Pensamientos inaceptables

Estas obsesiones pueden implicar aspectos religiosos (pensamientos blasfemos, dudas religiosas, imágenes irreverentes…) que le hacen sentir miedo al castigo de Dios o un desastre; preocupaciones sexuales (imágenes mentales de conductas obscenas, de incesto o relativas a la orientación sexual…); creencia de que la conducta de uno afectará negativamente a otros (p.ej., si se dan determinados números o colores sucederá algo malo); pensamientos acerca de la muerte de alguien con conductas compulsivas de formarse la imagen de esa misma persona viva u obsesiones somáticas (miedo a contraer una enfermedad o bien sudar demasiado y emitir malos olores).

Obsesiones relativas al orden o la simetría

Pensar que las cosas tienen que estar en un lugar correcto en nuestro espacio de trabajo u hogar, hacer tareas en un orden concreto de acuerdo a una secuencia o un número específico (p.ej., tras bajar del autobús debe entrar a casa tras dar exactamente 120 pasos que se deben de dar de la forma “correcta”).

Repetición

Estas obsesiones pueden implicar tonos musicales pegadizos, palabras, frases o imágenes que la persona no puede evitar pensar en ellas.

TOC de amores

El TOC de amores

Recientemente se ha comenzado a hablar del TOC de amores o TOC relacional. No está considerado como trastorno por sí mismo según el DSM-5, sin embargo, se incluye dentro del trastorno obsesivo compulsivo. Pero… ¿en qué consiste el TOC de amores?

El TOC de amores se caracteriza por la presencia constante de ideas obsesivas acerca de si la persona realmente quiere a su pareja. A nivel coloquial, se vincula a frases como: ¿tendré una buena relación de pareja?, ¿querré realmente a mi pareja?, ¿si me llaman la atención otras personas es señal de que no la quiero lo suficiente? o ¿seré buena pareja para él/ella?

Obsesiones

Los síntomas más habituales son dudas constantes sobre la veracidad del propio amor o el de la pareja, sensación de no merecer el amor de la pareja, comparaciones constantes, preocupaciones acerca de si es la persona adecuada, pensamientos intrusivos visualizando infidelidades, sensaciones de rechazo (“le miro y no me gusta tanto, no me apetece que se acerque a mí»), etc.

Compulsiones

Aparecen como la necesidad de comprobar qué sientes por la pareja, valorar el peso de la relación a lo largo del tiempo, comparar la relación con relaciones anteriores o con otras relaciones, analizar los defectos de esa persona, etc.

¿Cómo trabajamos el TOC relacional en terapia?

Desde la terapia psicológica podemos trabajar desde la terapia cognitivo-conductual, centrándonos en esas creencias irracionales (“me deben querer” o “debo querer” de una determinada manera) que mantienen esas dudas constantes e insoportables. Desmontaremos los mitos relacionados con el amor romántico que tanto daño pueden provocar dentro de las relaciones de pareja. Además, la reestructuración cognitiva será fundamental para aportar un mayor bienestar emocional y psicológico, facilitando la flexibilidad y funcionalidad.

Terapia TOC